En la poesía medieval encontramos dos escuelas o mesteres:
Mester de juglaría,
propio de los juglares, de carácter popular y surge en el siglo XII. Sus
composiciones se caracterizan por el empleo de versos irregulares y por cultivar
la épica
Sus composiciones siempre se difunden oralmente, en las plazas de los pueblos y en los castillos.
Mester de clerecía, propio de los clérigos, de carácter culto, que surge en el siglo XIII y se desarrolla en el XIII y XIV. Utilizan una métrica regular, la estrofa llamada “cuaderna vía”, y un lenguaje culto y cuidado. Una de sus finalidades es la de enseñar al pueblo analfabeto; de ahí que también utilicen el lenguaje popular.
Son composiciones de carácter narrativo y se presentan de forma escrita.
El primer poeta de esta escuela fue Gonzalo de Berceo (Milagros de Nuestra Señora) y uno de los últimos el Canciller de Ayala.